Tal como ha publicado Reuters, las previsiones para las ventas relacionadas con el sector del lujo están previstas que crezcan al menos un 5% este año, tanto en las tiendas de Estados Unidos como en Europa, se adquirirán productos relacionados con la joyería, relojería y zapatos de lujo.
Claudia D'Arpizio, socia de la oficina Bain & Company en MIlán y lider de Bain's Luxury Googs, asegura en la entrevista para Reuters que el conflicto de Ucrania no parece haber afectado al consumo de lujo por parte del resto del mundo, por lo menos, hasta el momento.
Desde Bain, estiman que a nivel global se alcanzará una cifra de ventas de al menos 305 billones de euros este año, y en el más optimista de los escenarios, podrían alcanzarse los 330. Todas estas estimaciones, tal y como admitió D'Arpizio, tienen en cuenta la inestabilidad bursátil que se vive ahora mismo en Estados Unidos y la posible recesión económica causada en gran parte por la guerra entre Ucrania y Rusia.
En cuanto al consumo de lujo en Rusia, obviamente, sí que se ha visto afectado: antes de la invasión a Ucrania, los rusos ricos aportaban alrededor de 7 millones de euros en las compras de estos productos. Ahora, tan solo representan el 2-3% del mercado mundial.
El pasado 2021, cuando el mundo empezaba a despertarse y a intentar recuperar un poco esa normalidad tras un 2020 marcado por el COVID-19, los analistas de Bain aportaron una serie de datos sobre el consumo de artículos de lujo en 2021: las ventas de estos artículos, que incluyen ropa, accesorios y productos beauty, alcanzaron los 288 millones de euros, cuando el pronóstico inicial era de 5 millones menos.