Los beneficios obtenidos por parte del segundo fashion retailer más grande del mundo caen en los meses de verano. Las ganancias del tercer trimestre antes de impuestos del grupo sueco han caído a 689 millones de coronas, lo que significa 60,9 millones de dólares, y caen desde los 6,09 billones del año anterior, muy por debajo de los 2,98 billones esperados por cinco analistas encuestados por Refinitiv, como indica Reuters.
Al ver como los beneficios de la compañía han caído, Helena Helmersson, la CEO de la compañía ha explicado a Reuters que llevarán a cabo un programa que les permita ahorrar hasta 2 mil millones de coronas suecas. Este ahorro pasa por reestructurar y simplificar el organigrama, así como adquirir unos equipos tecnológicos más baratos. No se harán tantos viajes de empresas y se buscarán alquilar oficinas más baratos. También explicó a la agencia de noticias francesa que habían subido los precios en alguna de las prendas de ropa, especialmente en las 'Tall Women' y que considerarían el precio de sus artículos como una herramienta importante para hacer frente al crecimiento de los costes. El incremento de los precios es una estrategia que Zara y el grupo Inditex también utilizaria para paliar los efectos de la inflación este otoño.
Esperan que se vean los primeros resultados de este plan de ahorros en la segunda mitad del año que viene.
Este descenso de beneficios ha sido causado por el aumento de los costes de las materias primas, los costes de fabricación y el incremento del precio de los combustibles desencadenado por el conflicto entre Rusia y Ucrania.