En su primer año como empresa cotizada, Puig ha cerrado 2024 con resultados financieros sólidos, superando las expectativas del mercado. La compañía registró un beneficio neto de 531 millones de euros, lo que representa un incremento del 14,1% respecto al año anterior, a pesar de los costes extraordinarios asociados a su salida a bolsa.
Las ventas netas alcanzaron los 4.790 millones de euros, un aumento del 11,3% en comparación con 2023, impulsadas principalmente por el sólido desempeño de su división de fragancias y moda, que generó ingresos de 3.538 millones de euros, un 13,6% más que el año anterior. La división de cuidado de la piel también mostró un crecimiento notable del 19,8%, mientras que el segmento de maquillaje experimentó una ligera disminución del 1,3%, atribuida a factores como la retirada de ciertos productos y una base comparativa elevada.
El EBITDA ajustado de la empresa aumentó un 12,3%, situándose en 969 millones de euros, y la deuda neta se redujo en 442 millones, alcanzando los 1.068 millones de euros, lo que refleja una sólida disciplina financiera.
Para 2025, Puig mantiene una perspectiva optimista, anticipando un crecimiento de ingresos netos entre el 6% y el 8%, y continúa enfocándose en fortalecer su posición en el mercado global de belleza premium