Indonesia 2026: certificación Halal obligatoria para exportar cosméticos
La globalización ha traído consigo nuevos desafíos regulatorios para las empresas cosméticas que desean expandirse internacionalmente. Uno de los más relevantes en la actualidad es la obligatoriedad de la certificación Halal para productos cosméticos en Indonesia a partir del 17 de octubre de 2026. Esta medida, impulsada por el organismo oficial BPJPH (Agencia de Garantía de Productos Halal), se sustenta en la Ley n.º 33 de 2014 sobre Garantía de Productos Halal, y establece un nuevo paradigma para la exportación a este mercado, que con más de 278 millones de habitantes representa no solo la nación con mayor población musulmana del mundo, sino también una de las economías emergentes más dinámicas de Asia.
A partir de esa fecha, todo producto cosmético que se comercialice en el país deberá estar certificado por una entidad extranjera reconocida oficialmente por el BPJPH, y contar con un número de registro Halal otorgado a través de la plataforma electrónica SIHALAL. Este cambio normativo no solo supone una transformación en los requisitos de acceso al mercado indonesio, sino que marca una tendencia global que está comenzando a replicarse en otros países con población mayoritariamente musulmana, donde la certificación Halal empieza a consolidarse como requisito de entrada para las marcas internacionales.
El mercado Halal cosmético: datos y tendencias
La cosmética Halal ya no es una categoría de nicho. Según el último informe del State of the Global Islamic Economy (SGIE 2023/24), el gasto mundial en cosmética Halal superó los 79.000 millones de dólares en 2022, con previsiones de alcanzar los 129.000 millones en 2027, impulsado por el crecimiento demográfico de la población musulmana, el aumento del poder adquisitivo en regiones como el Sudeste Asiático y el Golfo, y una demanda creciente por productos éticos, sostenibles y respetuosos con las convicciones religiosas.
Indonesia lidera el consumo en la región ASEAN, seguida de Malasia y Tailandia, mientras que a nivel global, los países del Golfo como Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, junto con Turquía y Egipto, representan mercados clave. En Europa, Francia y Alemania concentran la mayor parte de la demanda Halal en cosmética, con un enfoque creciente hacia la transparencia y la trazabilidad.
El consumidor Halal busca no solo la ausencia de ingredientes prohibidos (haram), sino también garantías sobre la ética en la producción, el respeto animal, y la sostenibilidad ambiental. En este contexto, la certificación Halal se alinea con tendencias globales como el clean beauty, el veganismo y la cosmética natural, convirtiéndose en un distintivo de calidad y responsabilidad.
El proceso de certificación Halal: requisitos generales y exigencias específicas para Indonesia
La certificación Halal se basa en una serie de requisitos generales aplicables a cualquier país: ausencia de ingredientes prohibidos (haram), trazabilidad en toda la cadena de suministro, control de contaminación cruzada, y cumplimiento con normativas religiosas y sanitarias. Todo ello debe estar respaldado por un sistema de gestión Halal bien estructurado.
En el caso específico de Indonesia, estos requisitos se amplifican y detallan a través del marco normativo definido por el BPJPH. Para las empresas cosméticas que desean acceder al mercado indonesio, estos son los elementos fundamentales del proceso:
- Diagnóstico inicial: análisis de la empresa, productos y cadena de suministro para determinar la viabilidad Halal.
- Formación: designación e instrucción del Supervisor Halal. Esta persona debe superar un curso reconocido y registrar su competencia en la plataforma SIHALAL de Indonesia.
- Auditoría de certificación: inspección de instalaciones, procesos y documentación. Incluye revisión de materias primas, aditivos, auxiliares tecnológicos y proveedores.
- Implantación del SJPH: sistema de gestión Halal que garantiza el cumplimiento continuo. Debe incluir controles internos, protocolos de trazabilidad, no contaminación cruzada y gestión de no conformidades.
- Emisión del certificado Halal: una vez verificados los requisitos, y auditada la empresa, se emite el certificado válido por un periodo de un año, renovable mediante auditorías de seguimiento.
- Registro en SIHALAL: el importador en Indonesia debe registrar el certificado y los productos en la plataforma SIHALAL. Finalmente, se emite el número de registro Halal necesario para el etiquetado.
Es importante recordar que este proceso debe ser gestionado en colaboración entre la entidad certificadora, la empresa exportadora y su importador o agente en Indonesia.Certificación Halal: una puerta a nuevos mercados
Y entonces surge la pregunta: ¿Cómo acceder con garantías a estos mercados? La respuesta es clara: a través de una entidad de certificación Halal reconocida internacionalmente. No todas las certificaciones Halal tienen el mismo valor en el comercio internacional.
Es fundamental que las empresas comprendan que solo aquellas emitidas por organismos reconocidos y acreditados internacionalmente son aceptadas en mercados como Indonesia, Malasia o los países del Golfo. El Instituto Halal, con sede en España y oficinas en México y Portugal, es en la actualidad la única entidad en España reconocida por el BPJPH para certificar cosméticos. Además, cuenta con reconocimiento por parte de JAKIM (Malasia), SFDA (Arabia Saudí), EIAC (Emiratos Árabes Unidos), HAK (Turquía) y otras entidades claves, lo que permite a nuestras más de 600 empresas acceder a todos los mercados con un único proceso de certificación.
El proceso de certificación Halal no solo garantiza el cumplimiento normativo en mercados como Indonesia, sino que abre la puerta a nuevas oportunidades comerciales y estratégicas en un contexto global cada vez más competitivo. Contar con este distintivo se traduce en diferenciación, acceso preferente a distribuidores y plataformas comerciales, y una conexión directa con consumidores que valoran la ética, la transparencia y la trazabilidad.
En este recorrido, el papel de las instituciones de apoyo ha sido y seguirá siendo fundamental. La colaboración del Instituto Halal con ICEX, STANPA, y las misiones diplomáticas ha permitido desarrollar acciones conjuntas de sensibilización, formación y acompañamiento a las empresas. Ejemplo de ello es el reciente webinar organizado junto a STANPA e ICEX, que reunió a más de un centenar de empresas interesadas en iniciar su proceso de adaptación al mercado indonesio. Estas sinergias entre sector público y privado permiten construir un ecosistema exportador más sólido y preparado.
Además, Indonesia representa una plataforma estratégica para toda la región ASEAN, compuesta por más de 650 millones de habitantes. Establecer una presencia Halal sólida en este país puede facilitar la expansión hacia Malasia, Filipinas, Tailandia o Vietnam, multiplicando el impacto comercial de las marcas certificadas.
Las puertas del mercado Halal están abiertas: la decisión de cruzarlas con visión y preparación estratégica es, ahora, más relevante que nunca.